Una irrupción de color

Flores digitales

Color,
abstracto e indiferente,
potente y evocador;
conciliador de sueños,
amante del amor.
Color,
siempre diferente,
puro, amable,
transparente,
saturado, luminoso, iridiscente,
oscuro y apagado,
duro y provocador,
tierno, pasteloso, fluorescente.
Color,
amante del amor.
Tu ausencia es la ceguera,
tu presencia,
el fervor para el pintor.
Color, vísteme del tono
del deseo evocador;
cúbreme de matices
del más tibio embriagador
al más frío indiferente
que hasta provoque dolor.
Color, color...
Del ultramar y el violeta,
al infrarrojo o al bermellón,
llena mis ojos de brillo,
satúralos de calor,
atrápame en un suspiro
de belleza y de pasión,
arrebátame mi alma
bañando mis ojos en sol.

Mariposas

Mariposa prisionera

Mariposas cautivas

Mariposas en cautividad

Mariposas en libertad

Mariposas nocturnas en cautividad

La dama mostaza con bastón

Mandala de la Naturaleza

Trabajo creativo de transformación sobre la base de un mandala para colorear de la serie de mandalas del Sur de la India, de Christian Pilastre.
Sobre el mandala original he ido creando una composición a base de imágenes que parten de los distintos fragmentos iguales de los que se compone típicamente el mandala y después lo he coloreado con rotuladores.
Muestro la imagen escaneada y algunos fragmentos donde se aprecia más de cerca la transformación.

Sangre

Serie de composiciones con el tema de la sangre, formato digital.


Manchones de sangre


Apósitos de gasa sobre sangre


Sangre en la alfombra


Sangre sobre superficie de mármol


Efusión de sangre

Baño a la luz de la Luna (Homenaje a Tamara de Lempicka)

Baño a la luz de la Luna y fragmentos, MariSol Rojas

Este cuadro que quería presentaros, lo pinté hace ya algunos años y pertenece a mi colección privada, forma parte de un serie de figuras femeninas titulada "Bañistas"; como es natural, todas ellas giran de alguna manera en torno al tema del baño, del agua.
Seguidora como soy de la pintura de Tamara de Lempicka, la cual me fascina, un día, mirando su cuadro titulado Retrato de Madame M., me sugirió imaginar esa magnífica pose en la que esta mujer fue pintada por Lempicka convertida en una de mis "bañistas" y me puse manos a la obra.
El resultado es la imagen que aquí os muestro y acompaño con la de Tamara de Lempicka para que comprobéis lo que os he relatado.
Esta obra es, en cierto modo, mi pequeño homenaje a esa gran artista que fue Tamara de Lempicka, aunque no es la primera (ni la última, supongo) en la que dejo explícita su influencia.

Retrtato de Madame M., Tamara de Lempicka